Juntos analizamos el potencial para mejorar tus resultados. El resultado de esta fase es un alto nivel de análisis que incluye una clara explicación sobre cómo y en qué áreas de tu negocio podemos aplicar la planificación y la optimización para mejorar tus resultados.
Nuestros consultores analizan tus datos y procesos de planificación y toma de decisiones. El objetivo es determinar en detalle la mejora potencial y definir un plan de acción y proyecto. El resultado final de esta fase es la presentación y el concepto de la solución.
Basándonos en tus datos y recursos, construimos un prototipo de un sistema de planificación que de una visión real de cómo funciona la solución. El prototipo es la base para un mayor desarrollo en la fase de proyecto. Otro entregable es un plan de proyecto detallado.
Ejecución del proyecto. Desarrollo e implementación.
En decide4AI utilizamos tres metodologías de proyecto diferentes o combinaciones de las mismas. En general no se puede decir que una metodología sea mejor que otra, sólo es posible determinar cuál es el mejor enfoque en el contexto de un proyecto específico.
Las metodologías Agile y DevOps tienen en común una entrega y pruebas más continuas. Mientras que la Cascada está más enfocada a la entrega de un resultado final sólido. La diferencia entre Agile y DevOps es que Agile está enfocado en una estrecha colaboración entre el cliente y el desarrollador para atender los cambios funcionales y nuevos conocimientos; mientras que DevOps se centra en una estrecha colaboración entre los desarrolladores y los departamentos de IT para garantizar un despliegue rápido y sin problemas. La combinación de Agile y DevOps es perfectamente posible.
En caso de que las especificaciones estén claramente definidas y se esperen pocos o ningún cambio, esta metodología de proyecto es la más eficiente.
Necesita una menor interacción con el cliente en comparación con la metodología Agile.
Las posibles desventajas son las limitadas posibilidades de incluir nuevos conocimientos y de atender a los cambios.
Un proceso de desarrollo ágil o Scrum es recomendable para proyectos en los que el objetivo final no se especifica en detalle.
El cliente dirige el proceso en base a entregables intermedios y los nuevos conocimientos pueden aplicarse rápidamente. En pequeños pasos, sprints, se entregan los productos intermedios que pueden ser evaluados.
La posible desventaja es el mayor nivel de esfuerzo del cliente.
Un proceso en el que se forman equipos de Operaciones IT y desarrollo para asegurar una mayor agilidad en ciclos de despliegue.
Se rompe el «muro» tradicional entre el equipo de desarrollo e IT, y un equipo de DevOps es responsable después del despliegue para enriquecer y mantener la aplicación.
Especialmente adecuado para aplicaciones con cambios funcionales frecuentes.