Genera una planificación de turnos óptima que cubra de manera eficiente la necesidad de mano de obra prevista y garantice la cobertura y los niveles de servicio. Se tienen en cuenta todas las restricciones y normas, como la legislación y convenios laborales, los modelos de turnos deseados, la duración mínima y máxima de los turnos, etc. El siguiente paso es la asignación de los empleados a los turnos en función de las habilidades, la antigüedad, las preferencias, la ubicación, y las prioridades y solicitudes de los clientes.